Cómo salir de la zona de confort

Qué es la zona de confort

La zona de confort es aquella que nos mantiene fuera del peligro, de los riesgos, del dolor. Pero también nos aleja de la satisfacción, del aprendizaje y del sentido de vivir y de sentirnos plenos. Como seres humanos necesitamos avanzar y evolucionar, por eso la importancia de salir de la monotonía, de esa zona de confort.

El problema es que no nos damos cuenta de que estamos en esa zona, pues se ha hecho ya una costumbre, un hábito el que hagamos todos los días lo mismo cayendo en la rutina. por tanto, estás viviendo? O estás sobreviviendo?

Todos nos quieren aconsejar sobre como salir de esa zona, pero es más fácil dar el consejo que hacerlo y poner el ejemplo, por eso quise hacer esta lista que me ha funcionado y que me ha ayudado a salir de la difícil zona de confort! Vamos pues!

¿Por qué salir de la ‘comodidad»?

Primero quiero darte algunos motivos por el cual es importante para tu alma, mente y cuerpo salir de la zona de confort. Pues, aunque parezca ser la zona «segura», no lo es, y aquí algunos de los motivos.

–No luchar por tus sueños

-No emprender

-Quedarte en una relación tóxica.

-No viajar.

-Mantener amistades negativas.

-Siempre vivir en el ayer.

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Saliendo del miedo, «zona de confort»

Para salir de la zona de confort muchas veces es necesario un mentor o coach que te ayude a llegar a tus objetivos, sin embargo, no es indispensable si sigues algunas recomendaciones y las haces parte de tu nueva rutina.

Identifica tus pensamientos reactivos: por ejemplo: si alguien te critica y genera en ti un enojo, cambia esa reacción por agradecimiento, pues la puedes tomar como una retroalimentación. Cuando sientas temor, rechazo o negación ante una crítica o comentario, imagínalo como un regalo, y que solo está fungiendo como espejo para que lo tomes.
Dígase a sí mismo «no tengo miedo» tener hábito de pensamientos negativos debilitan. Por eso, es mejor mantener mantras que empoderen. Ejemplo:» no tengo miedo» seguido de lo que quiere atreverse a hacer. Esto hace que podamos crear una nueva creencia.
Motívate: Encuentra una razón convincente que te saque de tu zona de confort, por ejemplo: yo tengo dos hijos, los cuales tienen una anergía muy intensa. Por tanto, eso es lo que me motiva a hacer actividades el fin de semana, aun cuando mi cuerpo desea quedarse a descansar en casa. Pero la felicidad de ver a mis hijos felices, conviviendo en familia y armonía, hace que la motivación se dé inmediatamente.
Prueba algo nuevo y sal de la zona: Tu impulso por lo seguro y familiar te está tratando de proteger, así que mentalizarte nuevos patrones, sonde lo nuevo también es bueno y familiar, que la aventura, los cambios, las cosas nuevas, siempre traerán aprendizaje, luz, amor a tu vida.
Da pequeños pasos: Engaña a tu cerebro y da pequeños pasos hacia tu objetivo, así no tendrá oportunidad de sentir que estás cambiando repentinamente tu vida. Esto funciona mejor que querer hacerlo todo de un solo tirón y al final nuestra mente se resista y nos convenza de no seguir haciéndolo.

Realice cambios en su rutina diaria

Cuando vivía sola en Morelia, mi antiguo hogar, solía siempre hacer lo mismo, trabajaba de 9 a 7, después iba al Gym de 9 a 10, mi día terminaba con una lectura de libro y a dormir! Me sentía como un robot, así que opte por realizar pequeños cambios. Como por ejemplo: