«Mientras más agradecido seas, más cosas para agradecer te llegaran»
anónimo
La gratitud tiene mucho mérito a la hora de librarnos de estrés, ansiedad, y mejor aún, nos coloca en una frecuencia alta donde el amor incondicional es quien nos invade. También, nos genera muchos beneficios a la salud, pues nos reduce el estrés, nos conecta al presente, eleva la autoestima, entre otros más. Existen hábitos de gratitud muy sencillos de seguir y ni siquiera notarás que estás haciendo un esfuerzo para llevarlos a cabo. Apreciarte a ti misma, hacer un diario de agradecimiento, practicar el agradecimiento y utilizar afirmaciones de gratitud son 4 hábitos de agradecimiento que personalmente me generan armonía, tranquilidad, amor y libertad.
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¿Cuantas veces agradeces al mesero que te atendió, al niño que te sonrió, a la anciana que te aconsejo, al chofer del metro, a los árboles, al mar, al viento, a la vida, a Dios? Estoy seguro de que muchas veces, pero lo hiciste conscientemente o de manera automática?… el modo de hacerlo y sentirlo es lo que realmente tiene el valor, sobre todo si sientes una gran gratitud por ti misma, por tu existencia, por tu vida antes que nada. Vamos entonces a ver esos 4 hábitos que nos generaran mucha más conciencia del poder de la gratitud
4 hábitos de Gratitud
1.- Apréciate a ti misma:
¿Como te estás hablando hoy? ¿Estás agradecida de haber despertado con salud, con energía? Mantener un hábito donde seas tu el centro del agradecimiento te generara menos niveles de estrés, podrá tu corazón mantener mejor circulación y conectar con esa energía de empatía con los demás fácilmente.
2.- Haz un diario de agradecimiento:
En un diario comienza no solo a escribir cosas cotidianas que te pasaron, sino a enlistar aquellas cosas que agradeces que se hayan puesto en tu camino, puede ser una cama caliente, un baño caliente, una comida que te encanto, una sonrisa en la calle, el espejo que te reflejo tu amor propio, haber terminado tu jornada laboral, haber conseguido un nuevo objetivo, tener a mamá, papá, hijos, hermanos, familia vivos, respirar, correr, caminar, abrazar, los colores del mundo, el pájaro frente a tu ventana, la siesta de la tarde etc. Hay muchos motivos para agradecer cuando miras el día a día como una bendición.
3.-Practica agradecimiento con una persona diariamente.
Que tal esa persona que te llevo en el taxi, aquella que te regalo una sonrisa, tal vez a la amiga con la que tuviste una plática larga y amena. Agradecer diariamente a una persona hace que envíes esas buenas energías a ella y a la vez tú la recibas también. Recordemos que lo que es afuera es adentro y eso que deseamos no lo estamos deseando a nosotros mismos. (ley del espejo)
Utiliza afirmaciones de gratitud:
Si comienzas a mirar todas las cosas como un regalo, como algo único y especial, podrás agradecerle, por ejemplo, «Estoy agradecido de tener este hogar, el cual me brinda tranquilidad, paz y armonía» si no tienes afirmaciones que salgan de tu corazón genuinamente, puedes comenzar con estas afirmaciones «Louis hay» que a la vez generan un amor propio inmenso en tu vida, utilízalos para ti misma y para los demás, incluyendo objetos como tu taza de café, tu cama, tu baño. Verás como poco a poco este hábito es parte de ti.
La práctica de los hábitos de agradecer.
Recordemos, mientras más agradeces, más motivos para agradecer tendrás. El amor se expande cuando ponemos en práctica hábitos que generan dicha, armonía y libertad en nuestra alma. La gratitud es un estado natural de nuestro ser y cuando lo activamos este se expande.
¿Cuéntame, ya practicas el agradecimiento a conciencia? Y si te ha ayudado, como ha sido?
Servicios:
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