Muchos queremos saber en qué pareja nos encontramos, si es pareja Dharmica o Karmica y ¿cuál es la diferencia? Aquí te doy un panorama desde mis estudios sobre el tema.»Pareja dhármica» es un término que se utiliza en el ámbito espiritual y de relaciones para referirse a una pareja que se encuentra en sintonía con su propósito o dharma individual y que comparte una conexión significativa basada en valores y metas comunes, por tanto, la karmica es lo contrario, con pendientes de vidas pasadas y cuentas saldadas pactadas.
Pareja Dharmica
En este contexto, todos queremos una pareja dharmica, pues «dhármico» se refiere al cumplimiento del propósito o deber individual de cada persona dentro de la relación. Una pareja dhármica reconoce y respeta los propósitos individuales de cada uno y trabaja juntos para apoyarse mutuamente en el logro de esos propósitos. Se fomenta el crecimiento y la expansión personal de cada individuo dentro de la relación.
Una pareja dhármica también se caracteriza por compartir valores y metas comunes. Comparten una visión similar de la vida, tienen objetivos alineados y se apoyan mutuamente en su crecimiento espiritual y personal. Además, se promueve una comunicación abierta y respetuosa, así como un compromiso con el bienestar mutuo y el bienestar del mundo que les rodea.
En resumen, una pareja dhármica es aquella en la que ambos individuos están alineados con su propósito y trabajan juntos para apoyar y nutrir sus metas individuales y compartidas. Es una relación basada en la conexión profunda, el respeto mutuo y la colaboración para el crecimiento y el cumplimiento espiritual y personal.
Pareja Karmica
Una «pareja kármica» se refiere a una relación romántica o íntima que está influenciada por la energía del karma. El karma, en este contexto, se refiere a la creencia de que nuestras acciones en vidas pasadas o en la vida actual generan consecuencias o lazos que afectan nuestras relaciones actuales.
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En una pareja kármica, se cree que hay lecciones pendientes, deudas kármicas o patrones de comportamiento arraigados que necesitan ser abordados y resueltos. Estas relaciones suelen ser intensas y pueden estar marcadas por altibajos emocionales, desafíos y conflictos recurrentes.
La idea detrás de una pareja kármica es que ambas personas se han reunido en esta vida para aprender y crecer a través de las lecciones y los desafíos que el karma les presenta. Pueden experimentar patrones repetitivos o situaciones difíciles que reflejan lecciones no resueltas o temas que deben abordarse para liberar el karma y evolucionar espiritualmente.
Es importante destacar que una pareja kármica no necesariamente es negativa. Si bien puede ser desafiante, también puede brindar oportunidades para el crecimiento personal, la sanación y la transformación. Estas relaciones pueden ser una invitación para que ambos individuos trabajen en su propio crecimiento y evolución espiritual.
¿Que te pareció esta información?, tú estás en alguna o has estado en alguna de ellas, estoy segura de que sí, pues desde antes de venir a la tierra hacemos lealtades para sanar ciertas heridas hechas en vidas pasadas o incluso en esta. Recuerda que todo se mueve al rededor de ti en referencia como tu te enfoques, lo que pienses y lo que hagas. Te abrazo y te animo a seguir aprendiendo sobre los misterios de la vida espiritual.
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